Que el CV ya no es aquello que utilizábamos antes de la aparición de internet, es una obviedad. Hoy no parece que pueda haber mejor CV que nuestra actividad profesional en la red. Las herramientas digitales y la participación en ese entorno forman una imagen de nosotros con la que un documento en formato de texto difícilmente puede competir.
El escenario digital es el lugar en el que mostramos lo que sabemos hacer y en el que las empresas pueden encontrarnos y ver eso que decimos que podemos hacer por ellas. Aún así siguen existiendo muchos momentos en los que precisamos un CV al modo tradicional. No quiero decir que tenga que ser en papel, que igual también, pero si en un formato de resumen curricular que sintetice los datos más importantes. Sigue lendo